En el Seder de Pascua, los judíos están obligados a beber cuatro copas de vino inclinándose hacia la izquierda. La Mishná (Pesajim 10:1) afirma que incluso los pobres están obligados a beber las cuatro copas. Cada copa se bebe en un momento concreto del Séder. La primera es para el Kiddush (קידוש), que santifica el día con vino; la segunda es para el Maggid (מגיד), cuando se narra la historia del Éxodo, la tercera es para el Birkat Hamazon (ברכת המזון), la Gracia después de las comidas, y la cuarta es para el Halel (הלל), o cantos de alabanza.
Hay varias explicaciones sobre las posibles fuentes de esta costumbre.
Una sugerencia es que las cuatro copas de vino proceden de la historia narrada en el Génesis(capítulo 40) sobre el mayordomo del faraón en prisión con José, que menciona la palabra «copa» cuatro veces. El Midrash sugiere que estas copas aludían a la liberación de los israelitas del dominio del faraón.
Las cuatro copas de alegría que se beben en el Séder son un tikkun (reparación) por los cuatro decretos malvados del Faraón de los que se liberó a los israelitas. Éstos incluían la esclavitud, el asesinato de todos los varones recién nacidos, el ahogamiento de todos los niños israelitas en el Nilo y la orden de que los israelitas recogieran su propia paja para hacer ladrillos.
Del mismo modo, las cuatro copas de vino representan los cuatro exilios que han sufrido los judíos: Egipcio, babilónico, griego y el exilio actual que está llegando a su fin.
Más adelante, en el Libro del Éxodo(6:6-7), la Torá describe cuatro tipos de redención:
Dios promete que liberará a los judíos, los sacará de Egipto, los rescatará y los llevará a ser Su pueblo. Según muchos, las cuatro copas de vino del Seder simbolizan estos cuatro pasos de la redención de Egipto.
El Gaón de Vilna relaciona las Cuatro Copas con cuatro mundos: este mundo, la era mesiánica, el mundo en el resurgimiento de los muertos y el mundo venidero.
Otra posible explicación es que, en la Hagadá, los judíos leen sobre los antepasados Abraham, Isaac, Jacob y el hijo de Jacob, José, pero las matriarcas no aparecen en la narración. Esta opinión sugiere que, por ello, cada copa de vino representa a una de las matriarcas: Sara, Rebeca, Raquel y Lea.
La Biblia de Israel explica la costumbre, señalando la posibilidad de una quinta copa:
En el Séder de Pascua se beben cuatro copas de vino, que corresponden a las cuatro expresiones de redención utilizadas en los versículos que describen el éxodo de Egipto: «Libera», «libera», «redime» y «toma»(Éxodo 6:6-7). Sin embargo, una lectura atenta de este capítulo descubre que hay una quinta expresión, «Yo os traeré», que se encuentra en el versículo siguiente. ¿Por qué, entonces, no tomamos cinco copas de vino en el Séder? El Talmud(Pesajim 118) explica que, si bien las cuatro primeras expresiones de la redención de Egipto se han realizado de hecho, la quinta expresión, «Os traeré a la tierra», aún no se ha cumplido por completo. Sólo cuando todos los judíos regresen a Israel y el Mashiaj llegue a Jerusalén nos alegraremos con la quinta copa.
Esta quinta copa está presente en el Seder como la tradicional Copa de Elías. Se coloca sobre la mesa, pero no se bebe.