La porción de Ha’azinu contiene la canción mencionada en la porción anterior de la Torá (Vayeilech), que Dios dijo a Moisés que enseñara a los Hijos de Israel para que comprendieran siempre las consecuencias de sus actos. Termina con Moisés preparándose para morir antes de que el pueblo cruce a la Tierra Prometida.
La bondad de Dios con Israel
El canto de Moisés comienza invocando a los cielos y a la tierra para que den testimonio de sus enseñanzas. Moisés describe detalladamente la grandeza de Dios. A diferencia de Sus hijos, Dios no es corrupto. Es perfecto y Sus obras son perfectas. Es Padre y Amo del universo, creó y formó el mundo entero.
Moisés dice que el conocimiento de Dios se transmitirá de generación en generación, dando cada una testimonio de que Dios estableció la tierra de Israel para los Hijos de Israel, que la repartió según el número de cada tribu, que cuidó de los israelitas y los colmó de bendiciones.
La Biblia de Israel explica que, mientras que la vida del hombre es efímera, el cielo y la tierra son eternos. Por eso Moisés decide llamarlos como testigos. Es conveniente que den fe del cumplimiento de la palabra de Dios, por mucho que tarde.
Puntos para reflexionar
Moisés llama a los Hijos de Israel «la suerte de [God’s] herencia». ¿Qué crees que significa eso?
La ingratitud de Israel y la ira de Dios
En contraste con la firmeza de Dios, Israel, predice Moisés, se acostumbrará a las bendiciones de Dios y se rebelará. La nación abandonará los caminos de Dios y le provocará con la idolatría. Entonces Dios ocultará Su rostro y dejará de ofrecer Su protección ante las amenazas del mundo exterior. El hambre, el sufrimiento y la guerra asediarán al pueblo.
Moisés dice que Dios amenazará con exterminar a la nación, como hizo en la época de Moisés, pero al final se abstendrá, aunque sólo sea para evitar que las naciones crean que han derrotado a Dios.
Moisés recuerda entonces al pueblo que siempre hay esperanza. Dios se apiadará del sufrimiento de Su pueblo y se volverá contra sus enemigos. Demostrará al mundo que sólo Él posee el poder de alterar el universo. Hará llover estragos y muerte sobre los que se levantaron contra Israel y los vengará. Moisés aconseja a las naciones del mundo que canten las alabanzas de los Hijos de Israel, pues los que se opongan a los israelitas acabarán sufriendo.
Puntos para reflexionar
¿Por qué crees que Dios buscará la retribución de las naciones si es Él Quien decidió que los israelitas sufrieran a manos de ellas?
Moisés se prepara para la muerte
Cuando Moisés termina su canto, que entonó con Josué, ordena al pueblo que preste atención a todo lo que ha dicho y que se lo enseñe a sus hijos. Con estas lecciones, el pueblo cruzará el Jordán y mantendrá a la nación próspera en la tierra.
Dios dice entonces a Moisés que ascienda al monte Nebo para que pueda contemplar la tierra de Israel antes de morir. Igual que Aarón murió en una montaña, Dios le dice a Moisés que él también morirá, y por la misma razón: porque los dos hermanos pecaron contra Dios en Meribat-cadés, ninguno merecía entrar en la tierra con la nación.
Puntos para reflexionar
¿Por qué crees que Josué cantó la canción con Moisés? Si te fijas en la porción anterior, donde se ordena el canto (31:16-22), él no está incluido en la orden, ni los comentarios introductorios señalan que Josué participara (31:30).