Sopa de lentejas

noviembre 30, 2024
A soup stand in Jerusalem (Shutterstock.com)

Una vez al año, en Shabat, leemos la porción de la Biblia tomada de Génesis 25:19 – 28:9, llamada Toldot. En hebreo, Toldot significa generaciones, y narra la historia de los veinte años de lucha por la fertilidad de Isaac y Rebeca, el nacimiento de sus hijos y, posteriormente, la épica rivalidad entre hermanos de Jacob y Esav. Por no mencionar su infame pelea, el intercambio de bendiciones y el hecho de que Jacob se viera obligado a abandonar su hogar.

En mi familia, sin embargo, esta porción de la Torá, o parsha, era, y sigue siendo, cariñosamente llamada «La Parsha de la Sopa de Lentejas». ¿Por qué? Jacob sirvió a Esaú un cuenco caliente de sopa cuando éste regresó de los campos, y muchas interpretaciones creen que en realidad era Sopa de Lentejas.

Este simple plato de sopa desempeña un papel crucial en nuestra historia que tiene consecuencias de gran alcance. Para comprender su significado, debemos profundizar en los personajes de Jacob y Esaú, hermanos gemelos que no podían ser más diferentes.

Esaú, el primogénito, era un hábil cazador, un hombre de campo. Era impulsivo, vivía el momento y se guiaba por sus apetitos físicos. Jacob, en cambio, fue descrito como un «hombre tranquilo, que habitaba en tiendas». Esta frase se interpreta a menudo en el sentido de que Jacob era estudioso, contemplativo y tenía una inclinación más espiritual.

La historia se desarrolla en un día como cualquier otro. Esaú vuelve a casa, agotado por la caza, y encuentra a Jacob cocinando una sopa roja. El aroma llena el aire, y Esaú, vencido por el hambre, pide un poco de sopa:

Este momento, aparentemente trivial, prepara el terreno para un intercambio significativo. Jacob, quizá viendo una oportunidad de corregir lo que consideraba un error cósmico (haber nacido segundo), ofrece cambiar la sopa por la primogenitura de Esaú: los privilegios y responsabilidades especiales de ser el hijo primogénito. En tiempos bíblicos, la primogenitura no era poca cosa. Incluía una porción doble de la herencia y, lo que era más importante, el liderazgo espiritual de la familia.

Esaú, centrado únicamente en su hambre inmediata, accede sin vacilar:

Este intercambio, centrado en torno a un simple plato de sopa, revela verdades profundas sobre la naturaleza humana, los valores y las consecuencias de nuestras elecciones.

Una interpretación, ofrecida por el erudito medieval Najmánides, sugiere que la sopa representa el apego de Esaú al mundo físico. Al cambiar su primogenitura por un simple plato de sopa, Esaú demuestra que valora más la gratificación inmediata que los beneficios espirituales a largo plazo. Najmánides sostiene que este incidente demuestra que Esaú no era apto para ser el heredero espiritual de Isaac, pues estaba completamente absorbido por el mundo material y se dejaba llevar por el instinto.

El color de la sopa también desempeña un papel importante en la historia. El texto destaca que la sopa era roja, y este detalle se convierte en una parte duradera de la identidad de Esaú. El pasaje afirma: «Por eso se llamó su nombre Edom»(Génesis 25:30). Edom, que significa «rojo» en hebreo, se convierte en otro nombre para Esaú y, más tarde, para la nación que desciende de él. Este nombre sirve como recordatorio constante del momento en que Esaú cambió su futuro espiritual por un plato de sopa roja.

¿Y de dónde procedían las «lentejas»? Según los comentarios rabínicos, Jacob estaba preparando una sopa de lentejas como comida reconfortante para su padre Isaac, que estaba de luto por la reciente muerte de Abraham, el abuelo de Jacob (y de Esaú). Según la costumbre judía, los alimentos redondos como las lentejas suelen servirse a los que están de luto. La forma circular de las lentejas simboliza la naturaleza cíclica de la vida y la muerte, y nos recuerda que el duelo, como todas las cosas, es un proceso que afecta a todos a lo largo del tiempo.

Sin embargo, Esaú no comprendió la gravedad del momento. En su hambre e impulsividad, no reconoció el significado más profundo de la comida que había preparado su hermano. Este descuido muestra aún más el contraste entre el carácter de los hermanos y su disposición a asumir las responsabilidades espirituales de la primogenitura.

Pero ¿por qué la Biblia se esfuerza tanto en recordar este detalle? Algunos comentaristas sugieren que no se trata de la sopa en sí, sino de lo que representa. El vibrante color rojo simboliza la pasión y la impetuosidad del carácter de Esaú. Del mismo modo que se sentía atraído por el rojo vivo de la sopa, se dejaba llevar fácilmente por sus deseos e impulsos inmediatos.

La voluntad de Esaú de cambiar su primogenitura -su herencia espiritual y su responsabilidad familiar- por un fugaz momento de satisfacción revela una profunda falta de aprecio por su herencia y su posible papel futuro. En nuestras propias vidas, debemos preguntarnos: ¿Cuáles son nuestros «derechos de nacimiento»? ¿Qué valores heredados, tradiciones u oportunidades poseemos que podríamos sentir la tentación de cambiar por ganancias a corto plazo?

En última instancia, esta historia encierra un poderoso mensaje que resuena incluso en nuestras vidas modernas. A menudo tenemos que elegir entre la satisfacción inmediata y los beneficios a largo plazo. El atractivo de la gratificación instantánea -ya sea en nuestras carreras, relaciones o desarrollo personal, o un plato de sopa bien caliente- a veces puede cegarnos ante las recompensas más significativas y duraderas que se obtienen con paciencia y perseverancia.

Sopa de lentejas de Helen (¡La receta de sopa de lentejas de mi familia!)

INGREDIENTES

  • 2 cebollas grandes
  • 4 tallos de apio
  • 4 Zanahorias
  • 2 tazas de lentejas
  • 1/2 Arroz integral hasta 1 taza
  • 5 cucharadas de sopa en polvo, o 12 cubitos de caldo
  • 2 cucharadas de comino
  • Sal
  • 1 cucharadita de chile en polvo

INSTRUCCIONES

Pica las cebollas, las zanahorias y el apio en dados de 1/2 pulgada. Añade todos los ingredientes a la olla de cocción lenta. Llénala con unas 10 tazas de agua. Cuece a fuego lento durante 6 horas. Añade más agua si la sopa se espesa demasiado.

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Sara Lamm

Sara Lamm is a content editor for TheIsraelBible.com and Israel365 Publications. Originally from Virginia, she moved to Israel with her husband and children in 2021. Sara has a Masters Degree in Education from Bankstreet college and taught preschool for almost a decade before making Aliyah to Israel. Sara is passionate about connecting Bible study with “real life’ and is currently working on a children’s Bible series.

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