¿Alguna vez has deseado realmente conseguir algo, pero has sentido que algo te lo impedía? ¿Te encuentras luchando con ambiciones religiosas y espirituales, obstaculizado por un velo de incertidumbre o duda?
Esta sensación de estar al límite, de querer hacer algo grande pero no poder avanzar, es algo que muchos de nosotros experimentamos. Según el rabino Natan de Breslov, la Biblia nos enseña una profunda lección sobre este tipo de lucha en la porción de la Torá de Pekudei (Éxodo 38:21-40:38), la última porción de la Torá del Libro del Éxodo. El final de esta porción de la Torá contiene un poderoso mensaje que aún nos habla hoy.
La porción de la Torá de Pekudei relata las etapas finales de la construcción del Tabernáculo, el hogar de la presencia de Dios entre los israelitas mientras viajaban por el desierto. Al terminar, desciende una nube que llena el Tabernáculo con la Presencia Divina:
Era un gran momento, pues simbolizaba la culminación y el cumplimiento de todo su duro trabajo. Sin embargo, curiosamente, Moisés se ve impedido de entrar por la propia manifestación de la presencia de Dios:
Moisés, que conversó directamente con Dios, que ascendió al monte Sinaí para recibir las Tablas de la Ley, se encuentra ahora obstruido por una nube divina. ¿Qué significa esto?
El rabino Najman de Breslov, un famoso maestro judío del siglo XVIII, explica esta escena de un modo con el que muchos de nosotros podemos identificarnos. Dice que la nube que bloquea a Moisés es como las dudas y los miedos a los que a menudo nos enfrentamos cuando intentamos conseguir algo importante. Es como una niebla que no podemos atravesar, que nos hace sentir atascados.
Pero Rabí Najmán nos dice que veamos esta niebla de otra manera. Dice que significa la proximidad de Dios, no nuestro aislamiento. Cuando luchamos o dudamos, no es señal de que estemos solos, sino de que Dios está con nosotros. La clave, sugiere, es adentrarse en esa niebla. Puede parecer aterradora, pero ahí es donde nos encontraremos rodeados del apoyo de Dios, que nos ayudará a superar nuestros retos. Igual que «las Presencias del Señor llenaban el Tabernáculo», si atraviesas la nube notarás que Dios te envuelve.
Esta idea nos anima a cambiar nuestra forma de ver los obstáculos en nuestro camino. En lugar de verlos simplemente como cosas que nos detienen, podemos verlos como oportunidades para acercarnos a algo más grande. Tener la valentía de seguir adelante, incluso cuando no estamos seguros del camino, puede llevarnos a lugares asombrosos. Nos reafirma en que superar los retos es una parte vital de nuestro viaje, y nos recuerda que nunca estamos solos: la guía y el apoyo de Dios siempre están con nosotros.
Alcanzar nuestros sueños puede ser duro. Habrá momentos en los que nos sintamos perdidos o bloqueados por las dudas. Sin embargo, si recordamos que esos momentos y pruebas nos acercan a algo más grande, podemos encontrar la fuerza para seguir adelante. Y al dar ese paso hacia lo desconocido, puede que encontremos exactamente lo que hemos estado buscando.
Los soldados israelíes arriesgan sus vidas para protegernos a todos del terrorismo islámico. Pero necesitan nuestra ayuda. Inscríbete en Acción Israel365 para recibir información actualizada sobre cómo TÚ puedes ayudar a luchar contra Hamás y sus partidarios en Estados Unidos y en todo el mundo.
