En honor del 75 aniversario de Israel, Israel365 se complace en lanzar una nueva serie de ensayos que desvelarán los secretos de la Biblia hebrea.
Extraído del próximo libro del rabino Akiva Gersh, 75 palabras hebreas que necesitas para entender la Bibliaestos ensayos iluminan la conexión entre palabras hebreas relacionadas, revelando secretos bíblicos sólo accesibles a través del hebreo.
Disfruta de la serie – ¡y feliz 75 cumpleaños al Estado de Israel!
רוּחַ
RUACH
ROO-ACH
ESPÍRITU
והארץ היתה תהו ובהו וחשך על פני תהום ורוח אלהים מרחפת על פני המים.
וידבר משה כן אל בני ישראל ולא שמעו אל משה מקצר רוח ומעבדה קשה.
Ruach, que en hebreo significa «espíritu», aparece en el segundo versículo de la Biblia como «un espíritu de Dios que barría las aguas» al principio de la creación del mundo. Del mismo modo, la inspiración divina se conoce como ruach hakodesh, traducido literalmente como «espíritu santo».
Los sabios enseñan que «una persona no peca a menos que entre en ella un ruaj shtut, un espíritu de insensatez». Puesto que el alma de una persona procede de Dios y siempre está conectada con Dios, sólo un espíritu ajeno a su alma puede hacerle pecar.
En otros contextos, ruach significa «viento» o «aliento». En la división del mar, «Dios hizo retroceder el mar con un fuerte viento del este(ruach) durante toda aquella noche, y convirtió el mar en tierra seca» (Éxodo 14:21). Unos versículos más adelante, vuelve a aparecer la palabra ruach , que esta vez significa «aliento». Después de que los hijos de Israel cruzan sanos y salvos a la otra orilla, cantan: «Al soplo de Tu nariz se amontonaron las aguas» (Éxodo 15:8).
Después de que el faraón aumentara la carga de los sufridos esclavos hebreos en Egipto, Moisés intentó consolar al pueblo. «Pero cuando Moisés contó esto a los israelitas, no quisieron escuchar a Moisés, a causa de su falta de aliento(ruach) y de la cruel esclavitud» (Éxodo 6:9). Su esclavitud les causaba tal estrés físico y emocional que eran incapaces de respirar con normalidad o de mantener una sensación de calma y concentración. En este doloroso estado emocional, ni siquiera podían asimilar la promesa de Dios de que pronto serían liberados de su esclavitud.